Hola, ¿cómo están? Soy la doctora Ximena González Calimayor. El día de hoy vamos a platicar un poquito acerca del síndrome metabólico.
El síndrome metabólico se refiere a un grupo de factores de riesgo que aumentan la probabilidad de sufrir enfermedades cardiovasculares, infartos cardiacos, diabetes, accidentes cerebrovasculares (infartos cerebrales) y otros problemas de salud. Este síndrome se diagnostica cuando están presentes tres de los cinco factores que mencionaré a continuación:
Glucosa en sangre elevada (azúcar alta).
Niveles bajos de colesterol bueno (HDL).
Niveles elevados de triglicéridos en sangre.
Circunferencia de cintura grande o cuerpo en forma de manzana.
Presión arterial elevada.
Es fundamental entender que el síndrome metabólico es una condición seria, que puede generar muchas complicaciones a largo plazo. Por ello, lo ideal es prevenirlo o tratarlo de manera temprana.
El diagnóstico se realiza observando la presencia de tres o más de los siguientes criterios:
Obesidad central: circunferencia de cintura mayor a 100 cm en hombres y mayor a 90 cm en mujeres.
Triglicéridos superiores a 150 mg/dL, incluso bajo tratamiento.
Niveles bajos de colesterol HDL: menos de 40 mg/dL en hombres y menos de 50 mg/dL en mujeres.
Presión arterial elevada.
Glucosa en ayunas mayor a 100 mg/dL o necesidad de medicamentos para controlarla.
Invito a todos a realizarse chequeos médicos periódicos, especialmente con un médico internista. Aunque el síndrome metabólico es más común a partir de los 40 años, cualquier adulto joven que nunca se haya hecho estudios debe considerar hacerse uno. Recuerden: no es necesario llegar a la vejez para desarrollar complicaciones graves. La medicina preventiva puede marcar una enorme diferencia en su calidad de vida.
El síndrome metabólico es un conjunto de factores de riesgo que, en combinación, incrementan significativamente la probabilidad de desarrollar enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, infartos cerebrales y otros trastornos graves. Es una condición silenciosa pero peligrosa si no se detecta y trata a tiempo.
Se diagnostica cuando una persona presenta al menos tres de los siguientes factores: glucosa elevada, presión arterial alta, niveles altos de triglicéridos, bajos niveles de colesterol HDL y obesidad central. Cada uno de estos factores, por sí solo, ya representa un riesgo; sin embargo, su combinación eleva exponencialmente las probabilidades de sufrir complicaciones de salud mayores.
La obesidad abdominal es uno de los principales indicadores visibles. Tener una cintura mayor a 100 cm en hombres o a 90 cm en mujeres debe ser motivo de evaluación médica. Los niveles anormales de triglicéridos y colesterol, junto con hipertensión y alteraciones en la glucosa, son detectables mediante análisis de sangre de rutina.
Aunque el síndrome metabólico es más prevalente en adultos mayores de 40 años, también puede presentarse en jóvenes, especialmente si existe un historial familiar de enfermedades metabólicas, obesidad, sedentarismo o malos hábitos alimenticios.
La detección temprana mediante chequeos médicos periódicos permite intervenir con cambios en el estilo de vida, medicación y otras estrategias para reducir los riesgos a futuro. Adoptar hábitos saludables puede prevenir la progresión hacia enfermedades más serias y mejorar considerablemente la calidad de vida.
La mejor herramienta contra el síndrome metabólico es la prevención. Realizar chequeos médicos anuales, llevar un estilo de vida saludable, controlar el peso corporal, mejorar la alimentación y mantenerse activo son medidas fundamentales para reducir los riesgos y mejorar la calidad de vida.
En Punto Clínico, contamos con médicos internistas altamente capacitados para evaluar, diagnosticar y tratar de forma integral el síndrome metabólico y sus complicaciones. No esperes a tener síntomas graves: agenda hoy mismo tu cita y apuesta por tu salud a largo plazo.
*Toda la información aquí contenida se publica con fines informativos y no reemplaza la evaluación de un(a) Médico(a) capacitado(a) para hacerlo. Todo método, procedimiento y/o equipo aquí descrito puede variar por médico y sucursal sin previo aviso. Ante cualquier duda, consúltanos directamente.